El Museo Kreeger

Uno de los mayores legados de David y Carmen Kreeger es el Museo que lleva su nombre. En 1959, los Kreeger comenzaron a reunir una formidable colección de arte moderno. Durante los siguientes quince años, reunieron la mayor parte del acervo del Museo. La colección refleja el espíritu de David y Carmen Kreeger, quienes coincidían en cada pieza que adquirían; su enfoque coleccionista era personal: compraban lo que les apasionaba.

El enfoque del Kreeger en la pintura de los siglos XIX y XX se evidencia en obras de Monet, Picasso, Braque, Stella, Mitchell y Frankenthaler, entre otros. La colección permanente también incluye obras de destacados artistas de Washington, como William Christenberry, Gene Davis, Sam Gilliam, Simmie Knox y Paul Reed. Excepcionales ejemplos de arte africano y asiático se integran en los espacios de la galería en ambos niveles. Diseñado en 1963 por Philip Johnson y Richard Foster, el edificio revestido de travertino se asienta sobre dos hectáreas y está rodeado de jardines de esculturas y terrazas. La misión del Museo Kreeger es compartir el arte, la arquitectura y la música.